“Las delicias del poder”, debería llamarse este post, sin embargo decidí llamarlo de diferente manera por la situación política en Ecuador.A raíz de la crisis Ecuador – Colombia, que todavía no ha sido aclarada para nada, toda la cola aún no aparece del todo, los actores de las tres partes mienten descaradamente y los pueblos (ecuatoriano y colombiano) siguen siendo burlados de una forma miserable.
El presidente ecuatoriano Correa ha roto la cuerda por el lado más débil, ha despedido al jefe de la inteligencia militar aduciendo que esta oficina tiene penetración de la CIA, lo que ciertamente es a mi manera de ver bastante insensato hacerlo, ya que el jefe en cuestión debe cumplir con un órgano regular bastante rígido y es muy difícil que hubiera ocultado información a sus oficiales superiores. Que las oficinas de inteligencia tienen penetración de la CIA es obvio, nadie podría negarlo, no las han penetrado ahora, lo han estado siempre. Pero más parece una disculpa o buscar un chivo expiatorio frente a la “inoperancia” de Ecuador frente a la crisis.
Hay muchas cosas que investigar, y la fundamental es la relación existente con las FARC, hay que buscar quién tiene esa relación, si es un sector corrupto dentro de las Fuerzas Armadas, o si hay miembros al interno del gobierno, pero hay una conexión y eso es obvio.
Ha descabezado al ministro médico y ha puesto a un poeta-político (Javier Ponce), tal vez por ese lado logre establecer una relación política eficiente con los militares, pero de investigación hasta ahora nada.
Es ridículo e insultante que la sobreviviente mexicana del bombardeo al comando del frente 48 de las FARC, haya declarado que estuvo allí porque investigaba las expresiones de cultura popular dentro de la guerrilla, es tonto pensar que alguien pudiera creer en semejante mentira mal hecha, considera a todo un país como estúpidos. Hubiera sido más creíble que hubiera dicho que fue a visitar a su amante que es miembro de la guerrilla, tal vez ahí hubiéramos considerado algo creíble su patoja historia.
Defender a un ciudadano ecuatoriano a capa y espada sin hacerse preguntas elementales, ¿qué hacía ese señor en el comando del frente 48?, luego las pruebas de las relaciones de este ciudadano con las FARC salen a la luz, el gobierno de Ecuador había metido la pata de forma irresponsable una vez más.
Tengo la impresión que se está usando el cuco de los años setenta, cuando la izquierda siempre buscaba hacer responsable de su inoperancia a la agencia de espionaje gringa.
Es obvio que en Ecuador hay espías de la CIA, así como también los hay de Israel, Perú, Colombia, Venezuela y Cuba, por poner solo algunos ejemplos, y si no tienen agentes en Ecuador los países antes mencionados, yo solo podría decir que están gobernados por aficionados. Eso es algo que TODOS los estados del mundo están obligados a hacer. Ejercicio de soberanía es justamente no permitir que nadie meta sus narices en nuestros asuntos, sea este quien fuere. La pregunta que me surge es justamente ¿por qué recién se dan cuenta que la CIA tiene metida sus narices?
¿No se dieron cuenta antes, o no convenía darse cuenta?
¿No será que están invocando al cuco para ocultar lo que verdaderamente está abajo?
¿No será que hay que invocar al cuco para de esa manera capitalizar un pésimo manejo político-diplomático y así asegurar su candidatura en agosto?
Pero cuando aparecen temas trascendentales como el aborto o el matrimonio gay, hasta ahí llega lo revolucionario, sale la expresión más retrógrada y fascistoidea, se invoca a la iglesia y a la religión católica, por lo tanto hay que hacer como los felinos, tapar con tierrita lo que huele mal, podría quitar votos necesarios para perpetuarse en el poder.
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